sábado, 3 de abril de 2010

Cuando no me mirabas



Imagen Rachael Harrison.

Me miras, yo me quedo en el horizonte al que no llegan los labios.

Es como cuando te aprieto contra la piel de mi cuerpo y siento que huyes sin remedio. Como cuando ciego recorro los caminos de tu cuello y veo que son los músculos los que levantan tu espada contra mí. Te acaricio la nuca despacio, me detengo en la raíz del cabello- que es fuego-, mis dedos parten hacia el sur nuevamente y entonces lo entiendo: no son el tacto de tu deseo.

Decaigo hacía mundo sombrío, donde los barcos sin vela, orientan la proa a la deriva. Sobre el azul el blanco de la tela navega los pechos que nunca serán míos porque no saben mi nombre, ni lo llaman a gritos. Me gustaría sentir que me miran y desde los bolsillos vacios las manos saldrían vestidas con la magia que atrae las sonrisas; luego prendería la luz de mis ojos con las centellas que la mar y el sol forman al mezclarse.

¿Acaso no ves cómo te hablan?

Mira, mírame mirarte como te miro; mira vida mía, mirame mirando; mira como navegan los barcos de mi vista.

Entonces del opaco de tus ojos de mar, se desprenden mis retinas golpeadas contra el muro, lastimadas por esa gelidez que alberga el espejo.

Mira, te abrazo,- me dices-, más entre tu piel y la mía todo el invierno cabe. Entonces te alejo y aquellas olas que rompen en el paseo se visten de luna y en mis ojos, diamantes con tu nombre nacen por última vez- ojalá fuera verdad-

Me miras,ya no me ves-¿lo hiciste alguna vez?- Mis ojos siguen mirándote en la distancia: tu silueta oscura enfrentada a la luna.

Vuelven a resonar aquellas olas en el horizonte al que no llegan los labios y tú no me ves.

Por el lobo que camina.

9 comentarios:

  1. Ufff, una obra de arte amigo, y no soy yo de elogios innecesarios, esa facilidad para describir paisajes y mezclarlos con amor y sentimientos. felicidades, me ha encantado.
    un abrazo.

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  2. Viniendo de vos amable Suso, el lobo se postra en sentida reverencia. Gracias por emocionarte con mi pequeña lobunada.
    Aullidos afectivos

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  3. Coincido con Suso, que belleza has dejado en esta entrada lobo. Lo he leído tres veces y en cada una de ellas me ha emocionado hasta la médula. !Que bueno haberte conocido!
    Un abrazo y mi admiración
    Cecy

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  4. Gracias biolumínica poeta, saber que mis letras emocionan al ser leídas, es el mayor de los regalos que pueden hacerme un navegante del azul tan amable.
    Aullidos lúminicos ser de luz.

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  5. Es casi inevitable ... avanzar por tus renglones y la necesidad de cerrar los ojos para que no se nos escape la esencia de las palabras ... irresistible diría yo, esta vez! Me ha encantado Lobo, mucho! Muacc

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  6. Niña de la bahía de Gerardo, Mela: al escribir no veo letras, aunque los ojos permanecen abiertos. los dedos acarician el teclado sin darse cuenta y son las teclas las que los guian, iluminandose en la noche. mientras, observo perplejo como dibujan lo la mente encierra. Si cierro los ojos puedo ver aquello que escriben los dedos, por eso en ocasiones, nacen diamantes que se precipitan hasta ellos.
    Aullidos más que afectivos.

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  7. Es difícil encontrar palabras que huyen como esos labios o ese cuerpo para describir los sentimientos que despiertan este texto…barco con vela pero sin el necesario viento del amor y la pasión que lo incite a navegar en ese mar de sentimientos … vacías se quedan las manos …el corazón… la luz de los ojos se vuelve sombría …me gusto esta frase “entre tu piel y la mía todo el invierno cabe”….es desgarradora…sabes mi querido amigo y discúlpame pero es que te siento amigo …leí con atención tu comentario y sé que tienes toda la razón …es que escritora no soy… ni poetiza solo un alma que intenta plasmar aquello que siente…que la estremece…la saca de sus raíces y lo vuelca impulsivamente en el blog….infinitas gracias por leerme …por prestarme tu atención me siento honrada…te dejo un beso y mi cariño

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  8. te equivocas Beatriz, escritor es aquel que siente las palabras como un dictado del alma y las hace papel ( o cibernaúticas naves sin papel )y no tiene por qué dedicarse a ese oficio ni publicar un libro.

    Decía un tal Becker que en vida no publicó salvo guias de viaje que:

    Carta I.-

    Antes de ahora te lo he dicho. Yo nada sé, nada he estudiado; he leído un poco, he sentido bastante y he pensado mucho, aunque no acertaré a decir si bien o mal. Como sólo de lo que he sentido y he pensado he de hablarte, te bastará sentir y pensar para comprenderme.
    Herejías históricas, filosóficas y literarias, presiento que voy a decirte muchas. No importa. Yo no pretendo enseñar a nadie, ni erigirme en autoridad, ni hacer que mi libro se me declare de texto.
    Quiero hablarte un poco de literatura, siquiera no sea más que por satisfacer un capricho tuyo, quiero decirte lo que sé de una manera intuitiva, comunicarte mi opinión y tener al menos el gusto de saber que, si nos equivocamos, nos equivocamos los dos; lo cual, dicho sea de paso, para nosotros equivale a acertar.

    Aullidos afectivos Beatriz

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  9. Lorena debemos ser seres transparentes y tal vez, sólo tal vez, no se merezcan nuestras miradas. "Otros ojos me esperan, otros cielos que tienen mi nombre escrito en la mirada." G.L.G.
    Aullidos y abrazos Con natural emoción

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