Nueve años no cambiaron nada

Imagen de la red.

"He aquí el molde lleno de trizaduras del destino
El molde de la venganza
Con sus frases iracundas despegándose de los labios
He aquí el molde lleno de gracia
Cuando eres dulce y estás allí hipnotizado por las estrellas"
V. Huidobro.


Hoy es el día en el que fenecieron los buenos. El día que es, fue y será tumba: cemento, ceniza y vigas retorcidas en el yermo parámo sin nombre. Tal día como hoy se derrumbaron las esperanzas y surgieron los miedos. Esos que luego, serían uvas en racimos de destucción y pena: La guerra. Torres tan altas como las diferencias de los hombres que pueblan la tierra, que reflejándose iguales en el espejo, se empecinan en lo distinto que no es carne, ni es sangre, ni hueso perecedero.

Nunca la religión fue tan política ¿cuál? me preguntas; La nuestra, la suya;todas y ninguna, es la respuesta que nace en el aire viciado por el humo de la hoguera. Da igual a que dioses se le adeuda la vida, a que seres se implora justicia divina o a quienes se ruega por una vida verdadera, más en la espera de ella, algunos engañan, mienten y se enriquecen dentro de los muros de piedra que nos separan. No, no hay más justa sentencia que la cadena de la naturaleza que es madre y sudario de todos los seres que tiemblan, respiran y sueñan.

Yo digo basta y arrojándo la venda que ellos me impusieron en la escuela, digo no a todas las mentiras habidas o creadas para cimentar la carcel de ésta existencia. Oriente, que fue la esencia de lo que ahora llamamos "esa casa nuestra" no es tan distinta ni nosotros adalíes de la verdad verdadera.

Puede que en la ofensa se aprenda el perdón, puede que en el odio crezcan lazos de amor, puede que un día todos seamos capaces de ver que en la vida, lo único importante es en si misma la actual existencia, porque lo malo es malo aun vestido de seda y matar nunca justifica una idea.

Nueve años no cambiaron nada el afecto por aquellos que ahora son luz y no materia.

Por el lobo que camina.